¿Qué es una reducción de estómago?

La reducción de estómago es una intervención quirúrgica donde los cirujanos extirpan parte del estómago del paciente y unen las porciones restantes para formar un nuevo estómago de menor tamaño, aproximadamente la décima parte del tamaño de su estómago original. Con ello el paciente se verá saciado antes y no podrá comer tanto, lo que le ayuda a perder peso. Además, la cirugía elimina la parte del estómago que produce la hormona que aumenta el apetito.

El cirujano hará algunos procederá a hacer unos pequeños cortes en el abdomen por donde insertará un laparoscopio, un instrumento con una pequeña cámara que envía imágenes a un monitor a la vez que otros instrumentos quirúrgicos con los que extirpará 3/4 de su estómago. Finalmente, volverá a unir el resto de su estómago para formar la "manga" o el tubo.

El procedimiento es permanente, y lo normal es que el paciente esté en el hospital unos 2 o 3 días.

 

Nuevos hábitos alimenticios tras la reducción de estómago

 

El primer día después de la cirugía, beberá líquidos claros. Para cuando salga del hospital, puede comer purés y batidos de proteínas, algo que normalmente continuará haciéndolo durante aproximadamente 4 semanas.

El paciente tiene que tener en cuenta que tiene que cambiar la forma de comer de por vida. Después de ese duro primer mes, cambiará a comer alimentos sólidos suaves muy lentamente. Entre los consejos a tener en cuenta:

  • Todo debe ser masticado a conciencia antes de ser tragado.
  • No beba nada mientras coma, podría hacer que su nuevo estómago se llene demasiado.
  • Beba líquidos aproximadamente media hora después de terminar la comida.
  • Evite las bebidas altas en calorías y los refrescos con gas.
  • Toma suplementos vitamínicos y minerales todos los días.
  • Después de 2 o 3 meses, puede pasar a las comidas regulares, pero recuerde, no podrá comer cantidades tan altas como antes.