Las enfermedades bucodentales más comunes

Conoce cuáles son las patologías de los dientes y la boca más habituales en adultos y en niños y descubre las características que tienen cada una de ellas.

Tener unos dientes y boca sanos representa uno de los principios básicos para tener una buena salud en general, pese a que en muchas ocasiones no se le de la importancia que requiere a estas dos partes de nuestro cuerpo. Ambas constituyen lo que se conoce en medicina como la salud bucodental, que representa uno de los mayores problemas a los que hace frente nuestra sociedad avanzada. 

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), 9 de cada 10 personas tiene riesgo de padecer algún tipo de patología bucodental en el mundo, definiendo patología bucodental como la alteración del funcionamiento de nuestra boca o dientes por la presencia de una enfermedad en ellas. 

Desde este organismo, alarman sobre la despreocupación en muchas ocasiones de la salud bucodental y piden concienciar a la sociedad del valor de nuestra boca y dientes para nuestra salud general y de la necesidad de asistir a especialistas. Prevenir es la clave de cualquier tipo de enfermedad y por ello en Hospitales Parque apostamos por especialistas en todas las áreas, con servicios como el de dentistas en Mallorca en nuestro Hospital Parque Llevant. 

 

Las enfermedades bucodentales más comunes

 

De la falta de conciencia social con respecto a los peligros que atañe a nuestra boca o nuestros dientes sin cuidado o prevención se suma el desconocimiento de cuáles son las principales enfermedades bucodentales. A veces incluso se perciben con normalidad desde la población y cuentan con una gravedad mayor de la que se cree. 

Ejemplos de ellos serían los problemas con el mal aliento, síntoma de una alteración del comportamiento de tu boca y cuerpo; las caries, que muestran sintomatología en última instancia, o la sensibilidad dental, que es muy común en la población, entre otros muchos. Así, hay personas que conviven con estas enfermedades durante muchos años, acudiendo al dentista cuando el dolor o la patología alcanzan su máxima gravedad. 

A continuación, vamos a distinguir las enfermedades bucodentales en cuatro grupos, diferenciándose por un lado entre patologías derivadas de una mala nutrición o de la ausencia de hábitos de limpieza con nuestra boca y dientes y, por otro lado, las afecciones más comunes en la boca y dientes de los adultos y de los niños. 

 

Enfermedades dentales por mala nutrición

 

En primer lugar, vamos a profundizar en las patologías que aparecen en la boca a causa de una mala alimentación. Antes de ello, vamos a recordar que la boca representa el primer paso a la hora de ingerir los alimentos y, por esta razón, es tan importante su cuidado. Los dientes, las encías…. y la boca en general ocupan un lugar muy importante en el proceso de digestión de las comidas. 

Tras comentar este factor, presentamos los principales problemas ocasionados en la salud bucodental por una alimentación de baja calidad o inadecuada

  • La aparición de caries: son ese gran enemigo a combatir en la boca y de cuya aparición pocos se libran. Pues bien, esta enfermedad tan habitual viene dada principalmente por la mala nutrición de la persona que la padece, siendo este factor un potenciador de la aparición de bacterias en la boca y, por consiguiente, caries.
  • Destrucción del esmalte: hay ciertos alimentos cuyo exceso de ingesta puede resultar muy dañino para la apariencia y salud de nuestros dientes, afectando a su esmalte. 
  • Enfermedades periodontales: como ya hemos comentado, la mala nutrición provoca un mayor número de bacterias en la boca y ello, además de a nuestros dientes, puede atacar a nuestras encías. 
  • Maloclusión dental: también puede darse que la alimentación de una persona provoque problemas en la posición correcta de los dientes y futuros problemas a la hora de masticar. 

¿Qué dieta se puede seguir para evitar la aparición de algunas de estas y otras muchas enfermedades bucodentales? La respuesta es muy sencilla, puesto que los requisitos para evitar una afección en tus dientes o encías por la mala nutrición no requiere muchos más esfuerzos que los que se pueden llevar a cabo con unos hábitos saludables en tus comidas. 

Hay que subrayar que el mayor peligro se encuentra en el azúcar, gran enemigo de los dientes, y que para cuidar nuestra boca debemos reducir la toma de carbohidratos y aumentar alimentos ricos en flúor y calcio. Estos dos nutrientes ayudan a combatir la aparición de caries y hacen que nuestros dientes sean más fuertes. 

Entre los mejores alimentos para unos dientes sanos se encuentran las verduras de hoja verde (espinacas, acelgas, etc), el té verde o los productos lácteos. Todos ellos tienen propiedades muy beneficiosas para la salud de nuestra boca. 

 

Enfermedades dentales por mala higiene

 

Otro de los factores que más afectan a la salud bucodental es la falta de higiene en los dientes, encías y cavidad bucal. Se trata de un mal hábito muy peligroso, que incluso puede generar problemas en otras partes del cuerpo, con consecuencias muy graves para la salud. 

De esta manera, mantener una rutina de limpieza dental será vital para seguir unos hábitos de vida saludable. Para ello, los expertos recomiendan cepillarse los dientes al menos dos veces al día, siendo muy importante hacerlo en profundidad después de cada comida. Además, se debe usar hilo dental diariamente para eliminar posibles restos de comida que se encuentren entre nuestros dientes. 

En cuanto a los enjuagues bucales, no aparecen como un deber para mantener una buena salud bucodental, siendo su uso menos decisivo. Sí que es más importante decantarse por utilizar productos dentales con flúor que, como comentamos en el punto anterior, puede ayudar a mantener nuestros dientes más fuertes. 

Pasamos a ver ahora cuáles son las posibles consecuencias, en forma de enfermedades, que pueden darse cuando no cuidamos la higiene de nuestra boca. Así, te traemos las principales patologías que se presentan a raíz de la ausencia de una correcta limpieza bucodental: 

  • Caries: la caries no sólo se presenta a partir de una mala alimentación, sino que su aparición se debe también a la mala higiene, que permite que la ingesta de alimentos como por ejemplo el azúcar quede en los dientes y los ataque de manera continuada. 
  • Gingivitis y periodontitis: la falta de higiene dental suele provocar la aparición de sarro y placa en nuestros dientes, lo que en su avance presenta enfermedades como gingivitis, que es una infección en la encía, o periodontitis, que da un paso más que la gingivitis con una encía inflamada y sangrante tras el ataque de una infección en la misma. 
  • Halitosis: el mal aliento representa una de las afecciones más incómodas y notables para las personas. Su aparición no sólo puede darse por problemas estomacales o de digestión, sino que también viene determinada por la acumulación de sarro y placa bacteriana en nuestra boca. Estos residuos generan un mal olor que se exterioriza con facilidad cuando se abre la boca. 
  • Enfermedades del corazón: aunque parezca extraño, la mala higiene de nuestra boca puede afectar a nuestra salud cardiovascular. ¿Cómo? La explicación es sencilla. La infección que se puede producir en nuestra boca por la falta de limpieza puede trasladarse a nuestro conducto sanguíneo y ello provocar problemas cardiovasculares. 
  • Diabetes: se ha demostrado que la mala salud de las encías está íntimamente ligada con la aparición de diabetes o el mal control del nivel de azúcar en sangre para los diabéticos. Por ello, cuidar las encías será necesario para revertir los efectos de esta enfermedad, si ya se padece, y, sobre todo, evitarla. 

 

Enfermedades dentales en los niños

 

Mantener un cuidado especial de la salud bucodental es muy importante en los primeros años de vida, con una buena alimentación y un inicio en los hábitos de limpieza de la boca. Crear una rutina desde pequeños será vital para que los niños crezcan con dientes más fuertes y saludables. 

Todo esto será decisivo para evitar la aparición de enfermedades tempranas en los dientes. Como ya sabemos, la boca puede ser el origen de multitud de enfermedades y los niños, por desgracia, no pueden evitar este riesgo. Además de la higiene, hay que señalar el peligro que sufren los más pequeños al ingerir más productos azucarados, que pueden ser muy dañinos para los dientes. 

En esta línea, nos encontramos con una serie de enfermedades que se dan de manera frecuente en la salud bucodental de los niños. Para ellos, al igual que en el caso de los adultos, es muy aconsejable acudir de manera asidua al dentista para mantener un control del crecimiento de los dientes y prevenir problemas futuros. 

A continuación, te detallamos varias de las afecciones más comunes en la salud bucodental de los niños: 

  • Presencia de caries: volvemos a recurrir a las caries, pero esta vez para determinarlas como la gran enfermedad bucodental más común en niños y adolescentes. La razón de que sean un grupo de riesgo en esta afección se debe a que en edades tempranas se suelen inclinar más por la ingesta de azúcares y carbohidratos, dos de los factores más potenciales en la aparición de caries. Además, la mala higiene dental por la falta de conciencia de los más pequeños ante el peligro que ello supone se suma también como golpe de efecto para que la gravedad sea mayor. 

La gravedad de la caries puede aumentar conforme pasa el tiempo, con la aparición de fuertes dolores e incluso la pérdida del diente si se llega al caso más extremo. Lo más importante en el caso de los niños, que se encuentran en edades de desarrollar los dientes, es acudir a revisiones periódicas con el dentista para poder detectar a tiempo cuando aparece una caries. 

  • Problemas en la oclusión dental: esta afección se refiere al mal encaje de los dientes al abrir y cerrar la mandíbula. Se trata de un problema que hay que atajar para evitar otras enfermedades y hacer que la mordida, que interviene a la hora de masticar los alimentos, sea la correcta. 
  • Traumatismos en los dientes: es bien sabido que los niños y adolescentes suelen ser propensos a las caídas y golpes, encontrándose los dientes como zonas en las que suelen hacerse daño. Sobre todo, esto ocurre en los primeros años de vida y en edades tempranas, con el inicio de los niños a caminar y la inestabilidad que ello conlleva y la práctica de juegos en grupo en el colegio u otros lugares. 

Ante cualquier golpe, lo más importante es ir cuanto antes a un odontólogo para que examine la zona y determine que no hay un daño visible o oculto en los dientes o encías. Si la caída ha sido grave, puede que el dentista tenga que intervenir e incluso se podría perder el diente. 

Cabe destacar que la gravedad también puede afectar al diente que vendría tras el diente de leche, si aún lo tuviera el niño, porque podría haber dañado el hueso al darse el golpe. También tenemos que tener en cuenta que si el diente se cae y es el definitivo hay que conservarlo para llevar a cabo un reimplante del mismo.

  • Gingivitis infantil: esta enfermedad suele atacar más a los adultos, pero su presencia ha aumentado sustancialmente en los niños en los últimos años. Según indican los expertos, suele aparecer a partir de los 5 años y se debe a una acumulación de la placa bacteriana en los dientes y encías. 

Esto desemboca en una inflamación e incluso sangrado de las encías, que se ven duramente afectadas y pueden llegar a padecer periodontitis si se alcanza la gravedad de la afección. 

  • Bruxismo infantil: esta es otra de las enfermedades que ha pasado de ser común sólo en adultos a tener cierta presencia en edades tempranas. Se trata de una patología ligada al estrés y la ansiedad y hace que los dientes se aprieten en demasía, con un mayor desgaste y dolores de cabeza o problemas en los músculos de la cara. 

 

Enfermedades dentales en adultos mayores

 

Además de los niños, otro grupo de riesgo en enfermedades bucodentales son los adultos mayores. Estos cuentan con un riesgo muy alto de padecer patologías en la boca y los dientes debido al desgaste de los mismos con el paso de los años y a la incidencia de factores como la mala alimentación o una higiene inadecuada. 

Por su parte, se halla el detalle de que a partir de los 65 años nos encontramos con un cambio físico en detrimento que afecta también a la boca y los dientes. Por consiguiente, te desglosamos los problemas más usuales en la cavidad bucal de adultos de edades avanzadas. 

  • Xerostomía: se trata de una disminución de la saliva que afecta a un sector de las personas mayores de 50 años. 
  • Pérdida de los dientes: la mayoría de los adultos mayores ven como su dentadura se ve debilitada con los años y suelen perder piezas en edades avanzadas. 
  • Caries: también aparece como enfermedad reiterada en este grupo de población. 
  • Retracción de las encías: este problema suele debilitar las encías desprotegiendo los dientes, viéndose íntimamente ligado con la aparición mayoritaria de caries. 
  • Periodontitis: aparece en casi la mitad de los adultos mayores, con menor o mayor gravedad, constituyendo un problema bucodental muy recurrido en estas edades. 
  • Cáncer en la boca: es la patología más grave y extrema, pudiendo afectar a los labios y la zona interior de la boca.