Detección precoz en el cáncer

El Cáncer es una enfermedad por la que se estima han fallecido durante el último año casi 10 millones de personas en el mundo. Unas cifras que no dejan indiferente. Sin embargo, es importante divulgar que algunos tipos de cáncer pueden detectarse y tratarse antes de que produzcan síntomas. La detección precoz o temprana de la enfermedad permite diagnosticarla en etapas iniciales, aumentando así las posibilidades un tratamiento curativo.
 

Se estima que se podrían curar hasta el 90% de los casos de cáncer de colon y recto si se detectaran precozmente. Consecuentemente, la detección precoz puede reducir también la mortalidad. En el caso del cáncer de mama, por ejemplo, puede reducirla entre el 25% y el 31% de los casos. La evidencia científica ha demostrado además que en determinados tumores puede resultar una forma efectiva de reducir el impacto que producen. 

Día a día vamos siendo más conscientes de la importancia que tiene la prevención y la promoción de hábitos saludables, y no solo en lo concerniente al cáncer, sino en muchas otras enfermedades, para la curación de estas.

Realizarse chequeos médicos periódicamente es una de las maneras de asegurar esta detección. Una revisión anual es recomendable para todos, y en función de nuestro estado de salud, nuestros antecedentes o dolencias puede ser recomendable que se realicen con mayor frecuencia. 
Para cualquier persona y de cualquier edad es importante la prevención. Pero sin duda, hay algunos factores que hacen que las revisiones médicas periódicas sean imprescindibles. 

Hablamos de personas con antecedentes familiares de enfermedades crónicas o cualquier tipo de enfermedad hereditaria genética, con factores de riesgo cardiovascular relacionados con el tabaquismo (principal causa de cáncer), diabetes, hipertensión arterial, hipercolesterolemia, obesidad, etc. Somos también candidatos para realizarnos un chequeo médico si tenemos más de 55 años, si hemos decidido iniciar intensa actividad física y, en contraposición, si no la practicamos nunca. 

El Dr. Jordi De Otero es médico internista en Hospital Parque Llevant y aclara que «es importante recordar que el chequeo preventivo está dirigido a detectar enfermedades no conocidas por la persona y, por tanto, no es imprescindible estar enfermo para acudir a la consulta de nuestro médico».

El chequeo médico básico consiste en realizar una anamnesis exhaustiva y adecuada, y en la práctica de exploraciones concretas; así como un análisis de sangre, orina y heces, un electrocardiograma y una radiografía de tórax.

En el caso de los hombres, a partir de los 50 años, es frecuente realizar una determinación de PSA para la prevención del cáncer de próstata y una prueba de sangre oculta en heces para prevenir del cáncer colono-rectal. En el caso de las mujeres, es recomendable una citología cada tres años, entre los 21 y 65 años y una densitometría ósea a partir de los 65. 

Autoexámenes y atención médica de forma regular pueden ayudar a que el cáncer sea día a día una enfermedad menos mortal.